Supuestos PNB asesinan “a traición” a un hombre en Barrio Blanco

Franklin Antonio Palmar Baez (31)

Ocho días luchó Franklin Antonio Palmar Báez, de 31 años, por su vida. Murió la noche de este sábado en el Hospital Universitario de Maracaibo, después de haber ingresado ahí el domingo 9 de febrero con un tiro en la espalda.

A las afueras de la morgue forense, sus familiares aseguraron que fue asesinado “a traición” por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Contaron que el hecho ocurrió en la avenida principal de Barrio Blanco, frente al Mercado Inca, a las 9:00 de la noche.

“Él iba de parrillero en una moto que manejaba un sobrino. A ellos los detienen unos motorizados de la PNB y les piden los papeles para hacer el chequeo respectivo. Los policías se fijaron que todo estaba en orden y les dijeron que se fueran a la casa porque la zona era peligrosa y las motos tenían ya prohibición de circular”, narró Fernando Palmar, hermano de la víctima.

Tío y sobrino iban hacia Cujicito, donde residía el hoy occiso. Tras emprender nuevamente camino, más delante de donde los habían detenidos, son interceptados por una patrulla del mismo cuerpo policial.

Fernando Palmar, hermano de la víctima

“Les prendieron la sirena para que se detuvieran pero como los acababan de revisar, y se supone que son los mismos, ellos no se pararon y los policías les hicieron dos tiros”, expuso el hombre. Una de las balas se alojó en la espalda de Franklin.

El mismo familiar que lo acompañaba, y que fue testigo de lo sucedido, lo trasladó hasta el Hospital Universitario de Maracaibo (HUM) donde, casi 8 días después del incidente, falleció.

Los dolientes de Palmar reclaman justicia ante las autoridades y aseguran que luego de que los uniformados dispararan, huyeron del sitio sin ninguna contemplación.

“Si esta cuestión hubiera sido un enfrentamiento, los Policías se quedan ahí y prestan un supuesto auxilio para llevar a la gente al hospital, pero no. Ellos se fueron como unos sicarios”, continuó diciendo Fernando Palmar.

Otra de las hermanas de la víctima, Taidée Palmar, dijo que su pariente laboraba colocando papeles ahumados a los carros en un “autoperiquito” y dejó tres hijos pequeños: dos hembras y un varón.

Se conoció que este caso permanece en abierto en una fiscalía del Ministerio Público, donde se investiga si, en efecto, hay responsabilidad de unos funcionarios policiales.

Fotos: Xiomara Solano

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