Sintraverliv está dispuesta a llevar negociación de contrato a Inspectoría del Trabajo
ÚN.- El Sindicato de Trabajadores de Cerveceros, Refresqueros y Licoreros de Venezuela (Sintracerliv) negó haber propiciado la paralización ilegal de la planta de Cervecería Polar Los Cortijos, Caracas, asegurando que la suspensión momentánea de actividades en la factoría se debió a una asamblea general de trabajadores debidamente convocada y anunciada a la directiva de la empresa.“Es falso que hayamos paralizado la planta de forma ilegal porque la empresa estaba al tanto de que íbamos a realizar una asamblea general de trabajadores”, afirmó Frank Quijada, presidente de Sintracerliv, quien calificó de “mentiras infundadas” las acusaciones hechas por Carlos de Lima, gerente general de Planta Los Cortijos, quien denunció la paralización de la producción y distribución de cerveza y malta en la región capital a raíz de la protesta realizada este lunes.Según Quijada, los trabajadores regresaron a sus labores una vez terminada la asamblea, y dijo que si la producción de la planta ha disminuido no se debe a falta de los trabajadores, sino a órdenes de la gerencia de limitar la fabricación de cerveza en 24 millones de litros mensuales, cuando la capacidad máxima es de 32 millones de litros al mes.Quijada recordó que la reunión –que cumplió todos los parámetros legales- se convocó para dar a conocer a los afiliados que la empresa solicita que 34 trabajadores de nómina mensual sean desincorporados de la lista de beneficiarios de la contratación colectiva, una situación que mantiene estancadas las negociaciones del contrato pues Sintracerliv se niega a llegar a acuerdos sin que los beneficios sean otorgados a todos los empleados.Tras afirmar desconocer las razones por las cuales la empresa hace esta solicitud, el dirigente negó que la representación sindical se haya ausentado de las mesas de negociaciones, pues asegura que pese a han asistido a las conversaciones con miras a alcanzar un pacto respecto a la convención colectiva para el período 2014 – 2016."Es la empresa la que fomenta el odio entre los trabajadores de nómina diaria y nómina mensual, además de utilizar los tribunales para intentar satanizar las protestas de los trabajadores, violando un derecho consagrado en la constitución", dijo Quijada.De allí que el vocero fue enfático al señalar que dada la insistencia de la empresa de excluir a la treintena de empleados de la contratación, Sintracerliv está dispuesta a trasladar la mesa de negociación a la Inspectoría del Trabajo correspondiente, lo que evidentemente demorará el alcanzar un acuerdo.“Desde el año 2000 hemos enfrentado muchos problemas en las discusiones de contratos colectivos con Polar, y eso queda en evidencia en las dificultades que enfrentan otros centros de trabajo que están discutiendo contrato en este momento, como sin las filiales de Pepsicola de Maracaibo y Caracas, Planta Turmero (Aragua) y Distribuidor Polar del Centro (suministro de cerveza).Sobre las acusaciones de violencia de género que se han hecho contra la directiva del sindicato de Planta Los Ruices, Frank Quijada negó que el gremio haya cometidos actos en desmedro de las damas que laboran en la instalación. “Esa es una patraña contra nosotros porque la semana pasada se anuló una sentencia en mi contra”, dijo.Quijada fue sentenciado a dos años de cárcel y el pago de una multa de 200 Unidades Tributarias, tras ser condenado por el delito de difamación contra Carlos de Lima y Tibisay Utrera, gerente general y gerente de Recursos Humanos de Planta Los Cortijos, respectivamente. Sin embargo, Quijada apeló la sentencia y obtuvo una respuesta favorable.
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