Asier Etxeandía: "Necesito agarrarme a las ilusiones de cuando era adolescente"

PAULA ARENAS

• "Para remover conciencias hacemos teatro", afirma Asier Etxeandía, que estrena 'Siempre me resistía a que terminara el verano'.
• "Estoy en ese momento de búsqueda de la verdad, acabo de cumplir los 40".
• "Sirve viajar a la infancia para no envejecer tan rápido".

En plena crisis de los 40, no deja de decirlo durante la charla, Asier Etxeandía (Bilbao, 1975) sube a las tablas del madrileño Teatro Marquina (desde el 30 de octubre) la obra de Lurato Perotti Siempre me resistí a que terminara el verano, de su productora Faktoría Madre Constriktor. Un montaje que habla precisamente de esa búsqueda o esa necesidad más acuciante cuantos más años se tiene de recuperar la pasión, las ganas de cuando todo era adolescencia.

Así, la obra cuenta la historia del reencuentro de tres antiguos amigos que vuelven al lugar donde fueron niños. Ese viaje en el que anda metido el actor y productor y del que quiere que el público aproveche la travesía.

¿La única manera de hacer lo que de verdad quiere era crear su propia productora?
Bueno, es el motivo por el que lo hicimos para hacer aquello que queremos y con lo que soñamos.

¿Nace en el fondo de una falta y un vacío?
Sí, y soy un devorador de teatro. Y necesito contar historias desde muchos lugares, música, teatro...

¿Y esta obra, qué busca?
Una búsqueda que tiene que ver con la verdad, por eso hago teatro, porque necesito entenderme y entender a los demás. Y por eso vuelvo atrás y busco. Y por eso el personaje vuelve al pueblo de su infancia, al lugar donde sí sabía quién era y ya no lo sabe. Tiene 40 años, como yo, y no lo sabe. Es muy emocional volver atrás porque te pone en un lugar de paz.

Y un poco en guerra, en el sentido de que remueve...
Para eso hacemos teatro para remover. Estoy en ese momento de búsqueda de la verdad, tengo 40 años, acabo de cumplirlos y quiero recuperar a ese adolescente. Y todo lo que nos rodea es tan duro, la situación política y social... Necesito agarrarme a las ilusiones de cuando era adolescente, a ese por qué empezamos lo que empezamos. Soy muy nostálgico.

¿Tiene que ver también esa vuelta atrás con recuperar la pasión de la adolescencia?
Tiene que ver mucho con eso también. Y con reencontrarse con los amigos y la familia. Y no quiero ser nada pretencioso.

¿Cree que es posible de verdad recuperar aquello?
No se puede volver a ese momento, pero sí hay que ir hacia atrás y ver qué opinaba aquel niño que fuiste y qué opina de lo que eres, de lo que haces ahora. No se trata de volver atrás para ser la misma persona, eso es imposible, no somos los mismos. Pero sirve buscarte para al menos no envejecer tan rápido.

Bueno, igual alguien vuelve más viejo del viaje...
Espero que no... Pero depende de cómo gestiones la información, de cómo la coloques. Al menos que se vuelva con una sonrisa interior... Ya te lo he dicho: soy muy nostálgico, y lo soy desde...

Vamos que nació usted nostálgico...
Soy nostálgico hasta de las vidas que no he vivido.

Igual las ha vivido...
Sí, seguro que he vivido muchas vidas. Y qué bien viví, si lo hice antes.

¿Ha llegado al lugar que buscaba?
Intento sobre todo mantenerme.

Pero cuesta...
Es que todo cambia cuando vas cumpliendo años. Aguantas menos. También está bien elegir. Lo que tengo claro es de qué quiero hablar.

¿Y de qué quiere hablar?
De la búsqueda y de la empatía. Y de hacer soñar, además de soñar. Y de entender a los demás y que nos entiendan.

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