Cecilia Sosa: El TSJ confiscó derecho a la protesta

La ex magistrada señala que con la medida se estaría afectando también las protestas del oficialismo

Diana Carolina Beltrán.- La ex magistrada del Corte Suprema de Justicia (antiguo TSJ), Cecilia Sosa, fue consultada sobre la última decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), en cuanto a la prohibición de las protestas pacíficas sin permisos y esta fue su reflexión:- ¿La interpretación del artículo 68 por parte del TSJ es motivo para continuar las protestas en el país?Van a seguir ocurriendo, esto quiere decir que se van a trasladar a las policías municipales -que siempre se han visto como preventiva- la labor de disolver las protestas que no tengan el permiso, convirtiéndose en una policía represiva. El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) con esa sentencia confiscó el derecho a la protesta. Algo interesante es que la Sala Constitucional está contribuyendo a la caída del Gobierno al legitimar acciones inconstitucionales. -¿Es viable la sentencia?La medida parte del criterio de que el órgano administrativo que autoriza o no la protesta se tiene que obedecer, pero la sentencia agrega que cuando se haga una solicitud para protestar y sea negada, pero aún así la protesta se lleve a cabo, todas las personas que hayan pedido esa autorización serán pasadas inmediatamente a un proceso penal.Cuando las sentencias son absurdas, todo tribunal se cuida de que sus sentencias sean inejecutables y que contradigan el natural desempeño de una sociedad, en consecuencia cuando el Ejecutivo controla todos los Poderes Públicos y utiliza la Sala Constitucional para que formalmente desmonte la protesta, es porque es tan débil que busca legitimaciones por cualquier medio y genera desobediencia al poder. - ¿Esta medida ratifica la restricción de manifestaciones de la oposición en el oeste de Caracas?Sí, el problema es que con esa medida se está afectando también a los ciudadanos del oficialismo. Si ellos quieren protestar porque su salario básico no es suficiente, por ejemplo, no lo pueden hacer. Este es el cuchillo del silencio; para mantenerse en el poder todos deben estar callados.